Nos quedamos en la habitación descansando y viendo la tele hasta tarde, pues la altura nos está cansando bastante. Hoy nos tomamos el día de relax, paseando por Uyuni tranquilamente vamos entrando a las diferentes agencias de turismo. Hay más de 60 y todas ofrecen lo mismo lo que cambia es el precio así que elegimos una medio al azar para comprar la excursión para mañana al Salar de Uyuni por 130 bolivianos/13,7€ por persona con la comida incluida.
Una escultura de hierro
El reloj en la plaza principal
Otro edificio en la plaza principal con una mujer con el vestido y sombrero típico
Un monumento delante del reloj
También aprovechamos para comprar el billete de bus a La Paz para mañana por la noche por un súper precio de 100 bolivianos/10,5€ cada uno. La gente paga hasta 250 bolivianos/26€, así que hemos conseguido una buena ganga pues después de hacer varias consultas y ver los diferentes buses hemos llegado a la conclusión que todos son más o menos iguales.
En Uyuni cuando se va el sol hace un frío bastante helado así que a las 7 pm ya estamos en un restaurante para cenar. Esta vez es un restaurante para guiris y pedimos una cremita de champiñones para calentarnos y una pizza riquísima.
A las 20:30 ya estamos en la habitación con nuestra estufa encendida viendo la tele y de repente comienza a salir humo y chispas del enchufe, ya deciamos nosotros que el ladrón que nos dejaron estaba bastante cascado. Lo apagamos todo rápidamente, escondemos la estufita y avisamos a la dueña de que se ha quemado el enchufe. Como solo hay uno no podemos ni ver la tele, ni cargar la cámara ni nada así que pedimos que nos lo arreglen, y la mujer se pone toda tonta diciendo que no puede arreglar nada y que nos devuelve el dinero de la tele y se la lleva, pero nuestro problema no es no poder ver la tele, sino poder cargar las diferentes baterías.
Se crea un clima bastante desagradable así que decidimos irnos a otra hostal pues la tía nos quería cambiar a otra habitación horrible, así que le pedimos el dinero y nos vamos al vecino que por el mismo precio la habitación está mejor y tenemos 2 enchufes.
Esta gente tiene tan pocas medidas de seguridad que cualquier día se les incendia todo y se electrocuta alguien. No están preparados para los cargadores de cámaras, teléfonos, ordenadores y menos para estufas furtivas.
Perdidos por el mundo 